Es Marzo de 2021, pudimos al fin realizar una de las escapadas mas deseadas, pero no se por que motivo, ibamos retrasando, hasta que por fin nos decidimos y la llevamos a cabo, en primer lugar estuvimos en Aliaga, y en la segunda parte de la escapada estuvimos en Montoro de Mezquita, dos poblaciones con un gran potencial turístico para el que quiera vivir la naturaleza en estado puro y un "Slow driving" para los amantes de la conducción tranquila y con vistas espectaculares.
Esta escapada la realizamos los días 26, 27 y 28 de marzo asi que arrancamos con el relato de la escapada.
Viernes 26 de Marzo de 2021.
El viernes por la tarde después de comer nos pusimos en ruta hacia Aliaga, había localizado con Google maps algunos aparcamientos en la población y al final me decidí por uno a la entrada de la población en la carretera antes de entrar en el casco urbano.
Sábado 27 de Marzo de 2021.
El sábado nos levantamos bien, no hubo apenas trafico en la carretera de entrada al pueblo y pudimos descansar sin ruidos, después de desayunar nos dispusimos a hacer el sendero de las pasarelas, optamos por comenzarlo a pocos metros del aparcamiento en la entrada de Aliaga y siguiendo las señales del sendero visibles en una de las calles hacia el rio para bajar hasta la orilla donde el sendero es paralelo adentrándose entre las montañas.
A los pocos metros el sendero se va encajonando entre el rio y la carretera y comenzamos a subir unas pasarelas para salvar el estrecho y el rio, un aperitivo de lo que veríamos unos kilómetros mas adelante, sobrepasado el primer monte a lo lejos ya podemos ver la vieja central eléctrica y la presa que pronto se rehabilitara para el turismo de la zona.
A partir de este punto el de la presa se divisa el estrecho y angosto camino entre montañas que debemos recorrer y que gracias a las pasarelas disfrutaremos, comentar que mucha gente comienza aquí el sendero ya que junto a la central aparcan muchos coches para hacer la visita, quiero recordar la necesidad de utilizar calzado adecuado para hacer estos senderos, que vimos mucha gente con zapatillas planas o deportivas y se adentran en estos caminos con el consiguiente peligro para ellos y ellas claro.
La verdad es que el sendero es espectacular entre el magnifico paisaje y estar siempre al lado del rio que nos acompaña en todo momento un ruido el del ruido relajante y pacificador de la mente y el alma...
Continuamos el camino y ya se vislumbra una de las paradas donde podríamos almorzar y reponer fuerzas, el molino ya abandonado, el limite donde no continuaríamos mas adelante, ya por el tiempo invertido.
A partir de este punto y como ya habíamos descansado y con el estomago lleno decidimos volver a Aliaga deshaciendo el camino con otra perspectiva, como siempre pasa entre las vistas de la ida y de la vuelta, asi que a volver...
