Viernes 17 de Mayo de 2019.
Como siempre que hacemos una quedada montañera, salimos los viernes después de comer y llegamos justo para juntarnos todos en el punto de destino y partida del sendero, con nuestros habituales saludos y abrazos después de no vernos desde la salida de otoño, tiempo para ponernos al día de nuestras cosas, cenar y dormir para levantarse pronto al dia siguiente...
Sábado 18 de Mayo de 2019.
El Sábado por la mañana sobre las 8,30 horas aproximadamente quedamos todo el grupo para salir al monte temprano como siempre para poder disfrutar del sendero y del dia, tuvimos suerte y aunque tuvimos algun problema en el ascenso por algún desprendimiento de tierras de los dias anteriores por las lluvias pudimos continuar para alcanzar nuestro objetivo y uno de los motivos principales de estas salidas montañeras que tanto nos gustan...
Por fin después de la ruta por fin pudimos hacer cima y disfrutar almorzando algo para reponer fuerzas y hacernos las fotos de rigor para dejar constancia de que estuvimos allí, con un breve descanso para disfrutar de las vistas y reponer fuerzas ahora ya para hacer la bajada hasta las autocaravanas...
Como siempre, el esfuerzo vale la pena a pesar de la climatología y las circunstancias del terreno y no estar muy bien señalizado, gracias a las tecnologías de y los trackers de los compañeros conseguimos llegar a buen puerto, y ya con el descanso hecho pusimos rumbo al pueblo por otra ruta distinta a la de subida mucho mas suave que ascenso...
Desgraciadamente la tarde empeoró con bastante frío y lluvia, que nos impidió hacer la comida de hermandad del dia, asi que tuvimos que comer y descansar en la autocaravana y cada uno a la tarde hizo lo que quiso, visita al pueblo, al monasterio, etc, nosotros como ya estuvimos, preferimos descansar un poco mas y despues salimos todos juntos para tomar uno potes, charlar y hacer un poco de tiempo hasta la hora de la cena que esta vez Juanjo encontró sitio y buen precio en el Hotel Restaurante Arco de San Juan.
Domingo 19 de Mayo de 2019.
La noche anterior después de cenar y antes de irnos a dormir como muchos ya conocíamos el pueblo,y su famoso monasterio, decidimos hacer el sendero para ir a visitar el cementerio de Sad Hill, de la película de Clint Eastwood, así que nos pusimos en marcha hasta nuestro nuevo destino.
Y después de la visita, emprendimos camino de vuelta como no podía ser de otra forma explorando de la mano de los compañeros otras rutas para hacerlo mas ameno y lo consiguieron con una ruta alternativa que estuvo muy bien y nos llevo hasta las autocaravanas.
Después de comer llego la hora de la despedida y el deseo de volvernos a ver muy pronto, así que nos volvimos para casa como siempre con el buen recuerdo de un fin de semana compartido entre muy buenos amigos de afición y con nuestra forma de viajar que tanto nos gusta.
Hasta la próxima!
